miércoles, 27 de agosto de 2008

Lo Que No Se Dijo

En la mañana de ayer pasando por la zona de la Javilla de Sabana Perdida donde vive el púgil Félix Díaz pude notar un tremendo charco de agua, luego al pasar de nuevo en la tarde cuando le preparaban el recibimiento vi como sacaron toda el agua y le echaron un relleno de caliche a la calle, todo para lavarle la cara de la miseria por un rato a tan olvidada zona. Como dicen por ahí la felicidad del pobre dura poco, ya que los vecinos tenían la esperanza de que ante tal hazaña les iban a asfaltar el pedacito de calle.

1 comentario:

Anónimo dijo...

asi es q son las cosas de este paisito

Qué pena crees que merecen los politicos corruptos?